Los rápidos avances en tecnología han provocado un aumento del interés público en la industria 4.0 y la robótica colaborativa. La conocida como cuarta revolución industrial – la revolución industrial de la tecnología – está en pleno auge. En esta etapa prima la agilización de los procesos productivos, reduciendo tanto los tiempos como los costes de fabricación. Esta nueva era se basa en la automatización de la industria, siendo un objetivo primordial para la gran mayoría de economías a nivel mundial.
Por tanto, el aumento del interés público en la robótica y la industria 4.0 se debe al potencial de estas tecnologías para cambiar nuestras vidas: La industria 4.0 y la robótica tienen, y tendrán aún más, una contribución muy positiva al aumento de los beneficios empresariales, la mejora de la eficiencia y la competitividad de las empresas.
La robotización de empresas y sistemas de producción hace posible automatizar una gran variedad de líneas de fabricación en múltiples tareas, convirtiendo a las plantas en organizaciones más eficientes. Integrar robots supone un aumento de la producción, gracias a una mejor gestión del tempo, recursos y materiales, una reducción de los costes y un aumento de la calidad, minimizando los productos defectuosos o los que no cumplan con los estándares de establecidos.
Es por ello por lo que es interesante conocer cuales son los países que se han incorporado de manera más efectiva a las nuevas tendencias robóticas, y así analizar cuales han sido sus efectos.
Indice de contenidos
Grado de robotización por países. Los 10 países más robotizados
Los 10 países con un mayor porcentaje de robots por trabajador del mundo son: Singapur (1), Corea del Sur (2), Japón (3), Alemania (4), Suecia (5), Dinamarca (6), Hong Kong (7), Taipei (8), EE.UU. (9) y Bélgica y Luxemburgo (10). Esto es de acuerdo con las últimas estadísticas de World Robotics, emitidas por la Federación Internacional de Robótica (IFR).
El país con la mayor densidad de robots sigue siendo, con mucho, Singapur con 918 unidades por cada 10.000 empleados en 2019, últimos datos disponibles. La industria de la electrónica, especialmente los semiconductores y periféricos informáticos, es el principal cliente de los robots en Singapur con participaciones del 75% del stock operativo total.
Corea del Sur ocupa el segundo lugar con 868 unidades por cada 10,000 empleados en 2019. Corea es líder del mercado en la fabricación de chips de memoria y LCD con empresas como Samsung y LG en la cima y también un importante sitio de producción de vehículos de motor y la fabricación de baterías para automóviles eléctricos.
Japón (364 robots por cada 10.000 empleados) y Alemania (346 unidades), ocupan el tercer y cuarto lugar respectivamente. Japón es el país de fabricación de robots predominante en el mundo, donde incluso los robots ensamblan robots. La industria eléctrica y electrónica tiene una participación del 34%, la industria automotriz el 32% y la industria del metal y maquinaria el 13% del stock operativo. Alemania es, con mucho, el mercado de robots más grande de Europa, con el 38% de los robots industriales europeos operando en fábricas aquí. La densidad de robots en la industria automotriz alemana se encuentra entre las más altas del mundo. El empleo en este sector aumentó continuamente de 720.000 personas en 2010 a casi 850.000 personas en 2019.
Suecia se mantiene en la quinta posición con una densidad de robots de 274 unidades que operan con una participación del 35% en la industria del metal y otro 35% en la industria automotriz.
Fuente: Interational Federation of Robotics
Con respecto a las industrias, el mayor uso de robots industriales en 2017 perteneció a la industria automotriz, que empleó alrededor del 42% de todos los robots, seguida por la industria eléctrica y electrónica con un 28%. *
Fuente: Interational Federation of Robotics
Por lo tanto, las industrias de todo el mundo están adoptando robots a un ritmo rápido. Es natural, entonces, preguntarse por el impacto en el mercado laboral. Si bien no hay una respuesta definitiva, una forma de pensar en esto es observar los efectos de los robots en el empleo.
Robotización en España
Según los últimos datos obtenidos por la Federación Internacional de Robótica (IFR), España se encuentra entre los 15 países más robotizados del mundo, una clasificación liderada por Corea del Sur.
Continuando con los estudios de la Asociación Española de Robótica y Automatización, se previó que España alcanzase la undécima posición a lo largo del año 2021, pues los cobots están presentes ya en la mayoría de los sectores económicos.
Por lo tanto, las industrias de todo el mundo están adoptando robots a un ritmo rápido. Es natural, entonces, preguntarse por el impacto en el mercado laboral. Una forma de pensar en esto es observar efectos negativos de los robots en el empleo. Sin embargo, estudios recientes han demostrado lo contrario, a mayor robotización mayor empleo: la implantación de la robótica colaborativa en las empresas supone la necesidad de diseñar, mantener y fabricar estos robots, con lo que los profesionales especializados resultan imprescindibles, además de que estos robots no están diseñados en la mayoría de los casos para sustituir el trabajo manual, sino para cooperar con ellos y realizar las tareas de manera más eficiente.
Actualmente, según la CEAC, hay falta de técnicos especializados en robótica en España, por lo que este proceso de automatización, presente ya en el 90% de las multinacionales españolas, supone una “oportunidad de oro” para muchos profesionales del sector. Para la gran mayoría de compañías, esta tecnología no ha menguado su plantilla, sino que ha planteado una reubicación de las tareas y ha puesto de manifiesto la necesidad de adquirir nuevas habilidades profesionales por parte de los operarios.
Dentro de nuestro país la robótica se ha implementado para la realización de tareas de todo tipo como, por ejemplo, la conducción de metros y ferrocarriles, la desactivación de artefactos potencialmente explosivos, en máquinas expendedoras inteligentes, la fabricación de automóviles o en la cirugía microscópica. La automatización ha aportado soluciones a las exigencias actuales del mercado español consiguiendo producciones más flexibles, eficientes y sostenibles.
Así pues, en el panorama internacional, España cuenta con un futuro prometedor situándose entre los líderes de la robótica y su aplicación en las industrias. Gracias a los equipos y laboratorios de I+D que trabajan para desarrollar nuevas tecnologías y a la inversión por parte de grandes multinacionales, empresas y pymes, el sector de la robótica española está creciendo exponencialmente, acercando la automatización a todos los servicios.
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