Industrialización es la transformación de una empresa manufacturera, mejorando todos los aspectos de su actividad para “pasar de ser un taller a ser una fábrica”. La industrialización cuenta con un enfoque proactivo y coordinado para aprovechar las nuevas tecnologías que suponen una mejora radical en las operaciones industriales, dónde se implica la necesidad de tomar una nueva perspectiva sobre cómo operar procesos.
Para una empresa, el principal objetivo de la industrialización consiste en conseguir una organización óptima y convertirse en una maquinaria perfectamente engrasada, donde todos sus procesos funcionan a la perfección, para pasar de ser un taller para convertirse en una fábrica.
La industrialización supone una verdadera transformación. La magnitud de los cambios a los que debe someterse es tan amplia que puede convertirse en una auténtica pesadilla si no se hace con los medios necesarios.
Cada vez más empresas de diferentes sectores, ya sea para conseguir una ventaja competitiva o por pura supervivencia por las características intrínsecas del sector en el que operan, inician sus procesos de industrialización, muchas veces acompañadas por nosotros.
Las empresas se industrializan, por tanto, para mejorar procesos industriales, como también para tareas de mantenimiento o mejora de productos. Para ello, diferentes empresas utilizan las tecnologías que engloban la industria 4.0, tecnologías que han sido capaces de revolucionar la industria tal y como se conocía hasta ahora.
CADE actualmente está ayudando a empresas de diferentes sectores a industrializarse y digitalizarse. En CADE nos dedicamos al suministro e integración de soluciones completas llave en mano para para optimización de procesos industriales, mediante robots colaborativos o cobots, consultoría integral de procesos, visión artificial, desarrollo, por lo que somos un socio confiable para realizar acciones encaminadas a la industrialización de las empresas.
En resumen, contamos con la siguientes capacidades y áreas de conocimiento para ayudar a las empresas a mejorar sus procesos productivos, y que así consigan una ventaja competitiva en su entorno:
- Robótica colaborativa
- Visión artificial
- Fabricación aditiva
- Digitalización de plantas (escaneado laser 3D)
- Digitalización y Sensorización de equipos
- Gemelo Digital
Industrializarse e integrar este tipo de tecnologías se han vuelto cada vez más crucial: Gracias a las nuevas tecnologías diferentes empresas pueden obtener beneficios en múltiples sectores, acelerando y mejorando los procesos productivos, reduciendo errores y costes, además de mejorando y creando puestos de trabajo.
¿Qué sectores se industrializan y aplican las tecnologías englobadas dentro de la Industria 4.0? Nos encontramos dos tipos de sectores según su grado de industrialización:
Indice de contenidos
Sectores con alto grado de industrialización
En resumen, estos sectores son aquellos en los que un gran porcentaje de las empresas que operan en ellos han sido capaces de transformarse, ya sea para conseguir una ventaja competitiva o por pura supervivencia. Estas empresas han sido capaces de, con un enfoque proactivo y coordinado, aprovechar las nuevas tecnologías que suponen una mejora radical en las operaciones industriales, dónde se implica la necesidad de tomar una nueva perspectiva sobre cómo operar procesos.
Sector de la automoción
El sector automoción es uno de los sectores en los que, en los que tradicionalmente, influenciados por economías de escala y un modelo de negocio basado en el volumen de ventas, están forzados a mejorar constantemente su competitividad para garantizar la viabilidad de los negocios que operan dentro de él. Las empresas de este sector dependen directamente de su capacidad de inversión y de innovación para sobrevivir.
En este sector históricamente muy susceptible a la aplicación de tecnologías de vanguardia, ya se utilizan tecnologías de Industria 4.0 en sus procesos productivos. Las tareas repetitivas y no ergonómicas se realizan con la ayuda de la robótica colaborativa, permitiendo así que operarios y robots trabajen de forma conjunta y en la misma área de trabajo. Por otro lado, la visión artificial se utiliza tanto en este campo como en otros para la detección de defectos durante los primeros procesos de fabricación. Esto permite reducir costes al detectar fallas antes de que el producto adquiera más valor en la cadena productiva.
Industria intermedia
Al igual que en el sector del automóvil, lo que podríamos denominar industria intermedia (fabricación de bienes de consumo, retail, materiales intermedios…) también utiliza estas tecnologías en sus procesos productivos. Además de la visión artificial y la robótica colaborativa que son aplicables a miles de tareas como la recogida de piezas, la metrología o la lectura de códigos, no podemos olvidarnos de la realidad aumentada, que permite, por ejemplo, aportar información y mejorar la ergonomía de los operarios en tareas complicadas y tediosas. También se utilizan la realidad aumentada y la realidad virtual en las tareas de mantenimiento eliminando manuales e información en formato papel. Otra de las tecnologías que más se utilizan son los AGV, ya que son muy útiles para el transporte de materiales de un lugar a otro de la zona de producción.
Sector energético
El sector no se está quedando atrás a la hora de introducir tecnologías de vanguardia. El tratamiento de grandes cantidades de datos, conocido como Big Data, permite optimizar el uso de la energía, determinar qué tipos de energía están disponibles a menor coste en cada momento e incluso se espera que esta innovación mejore y desarrolle un mejor aprovechamiento de la misma.
Estas empresas están buscando formas de mejorar la eficacia y maximizar las ganancias. Tener un mejor análisis de datos les permite a estas empresas satisfacer la demanda cada vez mayor de energía que tiene el mundo. Aprovechando la información que recopilan, las empresas pueden reducir el tiempo de inactividad y tener confianza para tomar decisiones sobre sus operaciones.
Además de todo esto, también se están desarrollando nuevas formas de almacenamiento de energía, sobre todo en el campo renovable.
Sector salud y farmacéutico
En el sector sanitario y farmacéutico, la introducción de nuevas tecnologías ha traído consigo nuevas y mayores oportunidades para que la industria de la salud brinde un mejor servicio y más personalizado. Los proveedores ahora están reconociendo la necesidad de innovar y mejorar los sistemas actuales que tienen.
En las industrias relacionadas con el sector sanitario y farmacéutico se utilizan tecnologías como AGVs para la mejora de la logística interna, visión artificial para la detección de defectuosos. Si hablamos de medicina como ciencia, tecnologías como la bioimpresión 3D se han convertido en herramientas imprescindibles. Las técnicas de impresión 3D combinadas con células y biomateriales se combinan para obtener tejidos que tienen las mismas propiedades que los tejidos vivos. Uno de los objetivos es imprimir un órgano humano completamente funcional. Asimismo, la fabricación aditiva también permite la creación de prótesis 3D, personalizando en cada caso la prótesis para el paciente.
Sectores susceptibles para industrializarse
Como ya hemos visto, algunos sectores ya cuentan con un grado de industrialización alto, es decir, la mayor parte de las empresas que lo conforman han sido capaces de aprovechar las nuevas tecnologías que suponen una mejora radical en las operaciones industriales, y por lo tanto han sido capaces de conseguir una organización óptima. Hay otros sectores en los que aun el grado de industrialización de las empresas que operan en él es relativamente bajo, como son:
Sector de la construcción
El sector de la construcción ha sido tradicionalmente un sector que no se ha caracterizado por la rápida e intensa incorporación de tecnologías de vanguardia, aunque esto está cambiando de forma rápida, ya que las disrupciones digitales han estado afectando incluso a esta industria.
Tecnologías como los nuevos materiales inteligentes, la realidad virtual y la impresión 3D han causado una gran disrupción en la industria en los últimos años, lo que ha permitido un proceso de construcción más creativo, eficiente y estable.
Las empresas de ingeniería y arquitectura están adoptando tecnologías de impresión 3D de nueva creación para crear modelos a escala detallados y precisos de edificios, así como para crear piezas de tamaño real en impresoras 3D que son difíciles de producir, lo que ahorra tiempo y dinero.
Sector agroalimentario
Por último, el sector agroalimentario, aunque con un grado de industrialización relativamente inferior a otros sectores, está empezando a utilizar tecnologías como los robots colaborativos, los drones para el control de los campos mediante visión artificial, entre otros. Es un sector que ha sido muy tradicional, pero que ha visto el beneficio en cuanto a calidad y ahora apuesta por las nuevas tecnologías.
En este sector, la robótica colaborativa puede implementarse en diversas actividades (lácteos, agroindustrial, vinícola, productos elaborados… entre otros) y utilizarse en diferentes aplicaciones, como son el envasado, empaquetado, paletizado y despaletizado, entre otros.
Conclusiones
La nueva tecnología está emergiendo a un ritmo cada vez más rápido, las empresas y sectores ahora deben decidir si van a ser disruptivas. Aquellos que no comiencen a innovar con nuevas tecnologías, serán dejados atrás por aquellos que opten por adaptarse y aportar mayores eficiencias a sus procesos de trabajo.
Hasta ahora, algunas empresas han optado por no dedicar tiempo y trabajo a estos cambios necesarios, pero están comenzando a sentir como pierden capacidad competitiva con empresas de su mismo sector, por lo que muchas están comenzando a ver que deben adoptar estas tecnologías para sobrevivir e invertir en nuevas empresas para darles una ventaja sobre la competencia.
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